0 - cero

 

El número Cero fue concebido en el sistema de numeración babilónico, alrededor del 300 a. C. pero llegó en Europa a través de los árabes y con mucha dificultad porque se veía como un signo inútil, sin valor, de hecho NO significa NADA. La función del cero era resaltar un espacio vacío. En India, la idea de vacío fue expresada por la palabra sánscrita "sunya" que también indica el concepto de "ausencia". La Iglesia  Católica se había opuesto, pero en la vida práctica el cero había hecho que todos los cálculos fueran más funcionales y fácilmente comprensibles. Fue asì que el cero entró en la vida diaria y su símbolo fue el Círculo, muy antiguo y que ya representaba la Totalidad, el Absoluto, Dios en su infinita incomprensión. Por un lado (Yin) el cero entonces es vacío, nada, ausencia, pero por el otro lado (Yang) geométricamente en el círculo es símbolo del Absoluto, de la Totalidad, de Dios. Pero los Mayas lo concibieron mucho antes ....

Los historiadores tradicionales de las matemáticas, siempre nos afirmaron que este número había sido descubierto en la India, y de ahì lo copiaron los árabes y despuès de estos a los europeos en el año 1202, a través la obra Líber Abbaci de Leonardo de Pisa (Fibonacci). Ese fue el sistema que conquistò el mundo pero tenemos que darle honor a una civilización màs antigua que usaron el Cero prima de todos: Los Mayas. 
La matemática maya era divina. El cero maya es un concepto que sintetiza la profunda relación entre su cosmovisión y cosmogonía, el cero maya, representa abstractamente, dentro de su cosmovisión, plenitud o completitud, no la ausencia, carencia o la nada —como pudiera pensarse hoy—, significa que hay dos categorías complementadas, plenas; una, que es inmaterial o espiritual, y la otra, material. Para cuando Huracán o Corazón del Cielo —dice el Popol Vuh— inicia la construcción del Universo, lo hizo midiendo y fabricando las cuatro direcciones (cuatro puntos) cardinales, asì nace la plenitud del Cero. A la final espiritualmente todo se colega y tiene el mismo sentido.
PD: Por lo tanto, incluso si el sistema maya incluía el número cero ya 400 años antes de Cristo, debemos reevaluar el concepto de este número en el sistema binario de la filosofía del IChing, que se remonta a tiempos aún más antiguos que los mayas pero que no era visto como un número en sí mismo sino más bien como una constante de mutaciones en el tiempo, razón por la cual a la filosofía de Iching no se le reconoce la invención del cero como número matemático.

LA ETERNIDAD DEL NÚMERO CERO
El Loco es el Arcano de los Tarot que encarna el número Cero, como un número èl emprende el viaje al infinito, porque el Cero mientras encierra el círculo como un útero, posee en su interior toda la luz y la materia o energía universal (de hecho en la Cabalá se llama Ain, la fuente de luz), y se convierte en totalidad. Recordemos que si los números pares son femeninos y los impares masculinos, mientras que el cero es andrógino primordial, el Pleno. Jung afirma que el símbolo del círculo (o esfera) se manifestó tanto en el culto solar primitivo como en las religiones más modernas (budismo tibetano), en las que sumergirse en una fase contemplativa, el cero representa el vacío circundante, el espacio. Sin embargo, nosotros vemos el cero en dos dimensiones, pero si pudiéramos verlo en 3 (tridimensional) geométricamente tendría la forma del tiempo en lo eterno (se llama la banda de Moebius), obviamente se convierte en el símbolo del infinito, porque doblarse en el tiempo y espacio forma el clásico número 8 acostado: ♾️
Este es el camino del Loco en el Tarot, el mismo que muchos planetas, como la Luna, dibujan a lo largo del año en las órbitas celestes: la Eternidad.

TOROIDE O TORO GEOMÉTRICO
El cero que aparentemente no es Nada lo incluye todo y en su interior esconde el misterio del pasaje de la materia que nace de la nada hacia el Todo. Ese pasaje lo vemos en una figura geométrica llamada Toro o toroide.  Todas las energías viajan en forma de espiral y están vibrando en un modo tal que forman un campo cuántico en forma de toro. Todo en la naturaleza emana èste campo magnético: el cigoto humano, hasta el iris del ojo es una toroidal y capta la luz en forma de toro, una manzana si la cortas por la mitad verás su forma toroide a medida que se expande hasta crecer, porque cada vibración que recibe la hace crecer, el planeta tierra emana igualmente èste campo de energía. ¿Y nosotros los humanos? Bueno, para hacer esto deberíamos tener abiertos todos nuestros campos magnéticos (corazón) y eléctricos (cabeza), los llamados chakras. Aquellos que viven conscientemente estos campos de energía su mundo atómico està en conexión con el mundo galáctico, es una sintonía con todo el universo. Una persona que emana amor tiene un campo magnetico màs ancho y se proteje mejor. Miren donde tiene la manzana sus semillas: en el centro, donde nosotros tenemos el corazón, porque es el punto CERO de emanación toroidal de la energía. 
¿ Por què el nùmero Cero es importante en la vida espiritual? porque es correspondiente a una virtud llamada Humildad sin la cùal es imposible acercarse al punto CERO que està en nuestro inconsciente


LAS FORMAS DEL CERO EN LA CREACIÓN
¿Habéis pensado alguna vez todas las cosas fundamentales que tienen la forma del círculo y por ende del nùmero cero? El óvulo de la madre es un cero, y su útero es otro cero, su panza de embarazada es otro cero ... En la Mesoamérica precolombina el cero era un ojo omnisciente. La palabra italiana Zero deriva del veneciano zevero, que a su vez se origina en el término latino zephirum, que en la mitología griega simboliza el viento del oeste. Fue el matemático Fibonacci quien utilizó por primera vez la palabra Zephirum, ya que la extrajo por asonancia de la palabra árabe sifr, que significa "vacío".
Nuestro mundo es un cero en el espacio. La cueva del ermitaño es un cero, pero dentro de esa cueva encuentra el infinito que es otro cero, dentro de ese vacío acecha el Todo.
La vagina también es un cero del que fluyen la vida y el placer.
En el árbol de la vida hay una Sefirot invisible, como si fuera un portal, se llama Da'at, es el vacío, el espacio necesario para acoger el Todo: la conciencia. Ese Cero, como un Huevo, encierra la Totalidad, como el huevo cuando la vida está lista adentro se abre, se rompen las aguas, el cielo de la tierra, el Yin del Yang se dividen, de este Cero se libera la existencia, la vida, la creación. Se dice que una Diosa (Ofion en forma de serpiente) al no tener dónde colocar sus pies, comenzó a bailar en círculo provocando una ola de viento que puso en movimiento el caos, inondò los elementos y salió la vida de la Nada (del Cero). 

EL LOCO EN LA VIA DEL CERO
En los Arcanos es el Loco el que hace un camino infinito iniciando de Cero y terminando en el Cero, de hecho su camino no tiene número, no tiene nombre, es invisible, pero sale por la derecha del àrbol (Corazón, Yin, hacia el amor). El Loco no tiene nada pero no le falta nada, es un viajero sin hogar que sin embargo va a todas partes por lo que la existencia es su hogar. En el vacío de su locura encuentra la razón. De hecho el Loco es el número Cero pero también el último de los  arcanos en algunas escuela (22), porque como esa serpiente original cuando da vueltas sobre sí misma, se muerde la cola, completa un ciclo (el Ouroboros) y pasa a una octava superior, a una nuevo nivel de existencia.
Muchos tienen miedo de empezar de cero, o de no contar para nada, pero ese es el momento en que el Loco descubre una nueva oportunidad de vida, un nuevo viaje.
Matemáticamente, ¿alguna vez ha intentado dividir un número por cero? Así crea Dios, se divide en balde, es decir, desaparece, y el resultado es: infinito O; ¿alguna vez ha intentado multiplicar un número por cero? se cancela, desaparece, lo mismo sucedería si intentaras volverte divino (multiplicarte al enésimo grado) sin ser Nada: te vuelves cero, nada.

AMOR + DUAL = EGO / DIOS X NADA = PUNTO CERO 
La mente para captar el Absoluto debe distinguirlo y dividirlo en su concepto abstracto, porque la mente no puede comprender al Uno, porque el Uno, por así decirlo, usa la mente para dividir todo en dos (es la distinción del Uno). Cuando lo distinguimos nos separamos y nace el Ego ... Ego = Yo separato. Esto es esencial, si no nos separamos no nos identificamos, no nacemos, no vemos al otro. Dios cuando crea a su imagen no hace otra cosa que verse a si mismo (Ego absoluto) pero para librarse de sì mismo (porque el Ego absoluto seria un suicidio) se abre, se dona, se encarna, se desdobla, desaparece (eso es humildad) es la naturaleza del amor, es el punto Cero. El Cero se abre y se vuelve 1. Los nùmeros, la matemática, la geometría, todo nace en el mismo modo. El Todo nace cuando el Todo muere o se separa de sì mismo.
El único modo que nuestra mente puede captar el Absoluto es dividiéndolo de sì mismo como no absoluto, no hay otro mecanismo, asì funciona nuestra psique, el Ego que nosotros vemos separado es tal porque para verlo hay que separarnos de èl, pero en realidad no està separado, es una ilusión óptica, asì como el Ego es un ilusión mental. Cuando lo piensas estás dividido, cuando lo vives estàs unido al Ego y en ese momento (punto cero) desaparece sea el Yo que el Ego... es por eso que Dios en realidad parece como si no existiera, es su naturaleza desaparecer, esconderse, aniquilarse, es Cero, Nada.

MEDITACIÓN DEL NÚMERO CERO
El número cero fue concebido en el sistema de numeración babilónico, alrededor del 300 a. C. pero llegó a Europa a través de los árabes y con mucha dificultad porque se veía como un signo inútil, sin valor, de hecho NO significa NADA (No olvidemos que los Mayas ya usaban 500 años antes que los árabes el nùmero cero). La función del cero era resaltar un espacio vacío. En la India, la idea de vacío fue expresada por la palabra sánscrita "sunya" que también indica el concepto de "ausencia". La Iglesia se había opuesto, pero en la vida práctica, el cero había hecho que todos los cálculos fueran más funcionales y fácilmente comprensibles. Entonces su símbolo como el Círculo era muy antiguo y representaba la Totalidad, el Absoluto, Dios en su infinita incomprensión.
¿El óvulo de la madre no lo ves como un cero? y su útero otro cero, su panza de embarazada otro cero, tus ojos, tus gotas de sangre... geometricamente todo se reduce como en el átomo a un cero ... En la Mesoamérica precolombina el cero era un ojo omnisciente. La palabra italiana Zero deriva del veneciano zevero, que a su vez se origina en el término latino zephirum, que en la mitología griega simboliza el viento del oeste. Fue el matemático Fibonacci quien utilizó por primera vez la palabra Zephirum, ya que la extrajo por asonancia de la palabra árabe sifr, que significa "vacío".
Nuestro mundo o planeta es un cero en el espacio. La cueva del ermitaño es un cero, pero dentro de esa cueva encuentra el infinito, dentro de ese vacío acecha el Todo.
La vagina también es un cero del que fluyen la vida y el placer.
En el árbol de la vida hay un Sefirot invisible, como si fuera un portal, se llama Da'at, es el vacío, el espacio necesario para acoger el Todo: la conciencia. Ese Cero, como un Huevo, encierra la Totalidad, como el huevo cuando la vida adentro está lista se abre y se dividen las agua, se divide el cielo de la tierra, el Yin del Yang, de este Cero se libera la existencia, la vida, la creación. Se dice que una Diosa (Ofión en forma de serpiente), al no tener dónde colocar los pies, comenzó a bailar en círculo provocando una ola de viento que puso en movimiento el caos, inondò los elementos y surgió la vida.
En los Arcanos es el Loco el que sale de este Cero, de hecho en muchas barajas no tiene número, es invisible, pero en el àrbol de la Vida sale por la derecha (Corazón, Yin, hacia el amor). El Loco no tiene nada pero no le falta nada, es un viajero sin hogar que sin embargo va a todas partes por lo que la existencia es su hogar. En el vacío de su locura encuentra la razón. De hecho el Loco es el número Cero pero también el último de los arcanos, el 22, porque como esa serpiente original cuando gira sobre sí misma, se muerde la cola, completa un ciclo (el Uróboros) y pasa a una octava superior, a una nuevo nivel de existencia, un salto cuántico.
Muchos tienen miedo de empezar de cero, o de no contar para nada, pero ese es el momento en que el Loco descubre una nueva oportunidad de vida, un nuevo viaje.
Matemáticamente, ¿alguna vez has intentado dividir un número por cero? Así crea Dios, se divide en sì mismo, es decir, desaparece y el resultado es: infinito. O: ¿alguna vez has intentado multiplicar un número por cero? se cancela, desaparece, lo mismo sucedería si intentaras volverte divino (multiplicarte al enésimo grado) sin ser Nada: te vuelves cero, nada.

EL VACÍO FÍSICO, LA NADA FILOSÓFICA, EL CERO MATEMÁTICO
Uno de los problemas más importantes de la física teórica es que la energía potencial no puede ser infinita. Esto implica que la distancia entre las partículas que componen el oscilador nunca puede ser cero o infinita, sin embargo, cuando el oscilador armónico cuántico se acerca al vacío o cero, sólo entonces es posible la creación de otros estados. Lo mismo sucede en el universo a nivel cosmológico, el colapso y el flujo total provienen del vacío y luego se crea la materia, como un big bang. Esto nos recuerda el pensamiento de los mayas, para ellos el cero no era el fin ni la ausencia del todo como la nada, sino que era el comienzo del Todo o de todas las cosas. Vivimos en una sociedad que teme la nada, teme perder, la muerte y busca tener cada vez más cosas, poseer lo absoluto. Al fin y al cabo, antimateria, materia oscura, agujeros negros, positrones y otros términos de la jerga de la física nuclear son los nombres con los que la ciencia moderna esconde, bajo un barniz tranquilizador y científicamente correcto, una noción primitiva: la nada, por terrible que sea, remota y esquiva, que pertenece a los orígenes mismos de la nuestra y de muchas otras culturas donde el origen del mundo siempre ha coincidido con el caos, el abismo y la nada.